Fecode se niega a que los niños colombianos tengan un mejor sistema educativo

La Federación Colombiana de Educadores (Fecode), que agrupa a los sindicatos de la educación pública vuelve a oponerse a una iniciativa que permitiría mejorar la calidad de la formación que reciben los niños, niñas y adolescentes en Colombia.

La iniciativa, presentada por la senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal, pretende brindarles mayores herramientas a las entidades territoriales para contratar con privados el servicio educativo.

De ser aprobado, este proyecto le permitirá a alcaldes y gobernadores contratar con colegios privados, no solo cuando existan cupos insuficientes o limitados en los establecimientos oficiales, sino también cuando se presente un déficit de calidad en los colegios públicos.

“La baja calidad de la educación en Colombia rebasó sus límites. Los resultados en el Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos -PISA-, muestran la necesidad urgente de hacer cambios estructurales en la manera cómo se preparan nuestros niños para afrontar los retos de un mundo competitivo y global (…) Hay que romper el monopolio de FECODE que somete a millones de familias y las deja sin opción” expresó la congresista del Centro Democrático.

Fecode no tardó en responder a la iniciativa de la senadora uribista, publicando en su cuenta de Twitter un mensaje de rechazo a lo que calificaron como un intento de «privatizar la educación pública», y expresaron que continuaran defendiendo la educación pública debidamente financiada por el Estado.

No es la primera vez que la Federación se opone a medidas para mejorar la prestación del servicio educativo en el país. No solo se han opuesto en múltiples ocasiones a la implementación de la evaluación docente, también han sido el principal obstáculo para el regreso a la presencialidad en las instituciones educativas oficiales.

Por esta razón no genera sorpresa que Fecode se oponga a un proyecto que supondría que miles de niños y jóvenes que hoy reciben educación subsidiada, reciban formación fuera de las aulas de los sindicatos, en establecimientos de mejor calidad e idoneidad sin comprometer la gratuidad de la educación.

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